Los procesos de compra en las empresas no son tarea sencilla y es necesario contar con un set de herramientas y estrategias que generen eficiencia, lo que ayuda a ser más competitivos.

Para trazar estrategias en compras es necesario mantener un enfoque global mirando a toda la organización en su conjunto.

Los encargados de organizar las estrategias en cada área de la empresa deben estar alineados entre sí y con la estrategia general de la compañía.

Esta sinergia promueve la creación de metodologías y protocolos que ayudan enormemente a la organización y siempre generan resultados positivos, no solo en el aspecto humano sino también en lo económico.

Te presentamos algunos consejos para lograr procesos de compra eficientes

  • Involucrarse en la relación con los proveedores: Comprar es una función fundamental. A pesar de ello es común encontrar empresas que restan importancia a la relación con los proveedores. Los proveedores son socios estratégicos en la comercialización de los productos que cada empresa vende, con lo cual es muy importante generar sinergia y mantener una comunicación fluida y amistosa con nuestros proveedores, y mucho más con aquellos que resultan críticos para el core del negocio.
  • Segmentar el personal: El proceso de compra cubre un espectro muy amplio. Abastecimiento estratégico por un lado y procesamiento de facturas y otra documentación por el otro. No todos los compradores tienen las habilidades necesarias para hacer todas las tareas. Verificar las capacidades de cada persona ayuda a desarrollar sus habilidades y posicionarlos en lugares estratégicos para obtener el mejor beneficio y fomenta las relaciones humanas dentro del equipo de trabajo.
  • Precio vs. Costo: No es lo mismo hablar de precio que de costo. El precio es solamente uno de los componentes dentro del costo, pero también existen otros factores a tener en cuenta
    1. Precio: Es el costo básico del producto
    2. Valor: Es el costo de la calidad del producto
    3. Costo de adquisición: Es la suma de todos los costos que se incluyen al adquirir un producto, como las condiciones de pago, el tiempo y esfuerzo, la capacitación relacionada con el producto que se va a comprar, etc)
  • Establecer objetivos y prioridades: Establecer prioridades consiste en encontrar el equilibrio adecuado entre la visión global, los recursos disponibles, las oportunidades potenciales de crecimiento y los obstáculos que se pueden enfrentar. Para esto, algunas de las prioridades más comunes incluyen:
    1. Reducción de costos
    2. Gestión de riesgos en la cadena de suministro
    3. Optimización de las relaciones con los proveedores
    4. SRM
    5. Gestión de calidad
  • Aprovechar la tecnología: Las mejoras tecnológicas brindan a las empresas más tiempo e información al tiempo que permiten integraciones más fáciles. Varios estudios han demostrado que la tecnología adecuada puede tener una influencia positiva en las compras estratégicas, la integración logística y el desempeño comercial de una empresa.